Abraxas Pictures
The Oily Maniac (1976)
Meng Hua Ho, 1976, Hong Kong
You Gui Zi, Oily Maniac
You Gui Zi, Oily Maniac
Curioso y descerebrado acercamiento de la Shaw Brothers al género del Horror. El Cantonés Meng Hua Ho (La Guillotina Voladora, 1975, Black Magic, 1975. En total unas cincuenta películas con la Shaw Brothers, que abarcan todos los géneros) se quiso adentrar, a su manera, en el terreno de las historias de Superhéroes urbanos que operan al margen de la ley. Eso sí, aquí no nos vamos a encontrar con los típicos fantoches embutidos en mallas de ballet, o chillones leotardos de colores, ni nada mínimamente parecido. El Maníaco Grasiento, nombre con el que bautizaron a este superhéroe majareta, no es otra cosa que un enorme zurullo cubierto de aceite, con dos bombillas como ojos y un corazón palpitante que asoma de su pecho mugriento. Pero ante todo, es un salvaje iracundo con muy malas pulgas que se lo pasa en grande tomándose la justicia por su mano... a manotazo limpio mejor dicho.
Chen Yuan (Danny Lee, Inframan, 1975) es un joven enfermo de la Poliomielitis, lo que le obliga a andar con muletas desde la niñez. Un fatídico día contempla como unos criminales intentan apropiarse del negocio de su tío que, en la trifulca asesina involuntariamente a uno de ellos. Condenado a muerte, poco antes de su ejecución revela a Chen Yuan el secreto de un antiguo conjuro. Un hechizo que puede otorgarle una fuerza sobrehumana, un poder casi ilimitado que solo podrá utilizar para ayudar a los más desfavorecidos.
Todo lo que tiene que hacer es cavar un agujero en el suelo de su casa, introducirse dentro, invocar el maleficio mientras se va hundiendo en un cenagal de líquido mugriento y... ¡tachán! Al instante emerge nuestro amigo convertido en el ¡Maníaco Grasiento!, una especie de Hulk embadurnado de caca y aceite profiriendo berridos demoníacos.
A partir de ese momento, todos los esfuerzos del Maníaco Grasiento se van a centrar en repartir estopa para hacer justicia "a su manera" en una población atestada de criminales, violadores, estafadores y demás calaña que campan a sus anchas. Por descontado, sobra decir que acaba saliéndose con la suya, y de qué manera...
A ritmo de la música de "Tiburon", el Maníaco Grasiento es capaz de transformarse en un charco de aceite que se desliza por el suelo a gran velocidad, lo que le permite perseguir coches, escabullirse por debajo de las puertas, pegarse a paredes y techos y acechar a sus víctimas camuflado en el agua. También corre, vuela y salta edificios al más puro estilo Ninja, además, las balas les resbalan en la grasa (¿?) y puede regenerarse de cualquier miembro amputado, y me quedo corto. Vamos, unos poderes que ya los quisieran para sí muchos superhéroes de postín.
Chen Yuan (Danny Lee, Inframan, 1975) es un joven enfermo de la Poliomielitis, lo que le obliga a andar con muletas desde la niñez. Un fatídico día contempla como unos criminales intentan apropiarse del negocio de su tío que, en la trifulca asesina involuntariamente a uno de ellos. Condenado a muerte, poco antes de su ejecución revela a Chen Yuan el secreto de un antiguo conjuro. Un hechizo que puede otorgarle una fuerza sobrehumana, un poder casi ilimitado que solo podrá utilizar para ayudar a los más desfavorecidos.
Todo lo que tiene que hacer es cavar un agujero en el suelo de su casa, introducirse dentro, invocar el maleficio mientras se va hundiendo en un cenagal de líquido mugriento y... ¡tachán! Al instante emerge nuestro amigo convertido en el ¡Maníaco Grasiento!, una especie de Hulk embadurnado de caca y aceite profiriendo berridos demoníacos.
A partir de ese momento, todos los esfuerzos del Maníaco Grasiento se van a centrar en repartir estopa para hacer justicia "a su manera" en una población atestada de criminales, violadores, estafadores y demás calaña que campan a sus anchas. Por descontado, sobra decir que acaba saliéndose con la suya, y de qué manera...
A ritmo de la música de "Tiburon", el Maníaco Grasiento es capaz de transformarse en un charco de aceite que se desliza por el suelo a gran velocidad, lo que le permite perseguir coches, escabullirse por debajo de las puertas, pegarse a paredes y techos y acechar a sus víctimas camuflado en el agua. También corre, vuela y salta edificios al más puro estilo Ninja, además, las balas les resbalan en la grasa (¿?) y puede regenerarse de cualquier miembro amputado, y me quedo corto. Vamos, unos poderes que ya los quisieran para sí muchos superhéroes de postín.
Guión: Lam Chua (como Tsai Lan) / 84 min, Color.
Compañía de Producción: Shaw Brothers / Música: Yung-Yu Chen
Reparto: Danny Lee, Ping Chen, Lily Li, Lun Hua, Hsieh Wang, Chien Yu, Feng Ku, Hung Wei.
Compañía de Producción: Shaw Brothers / Música: Yung-Yu Chen
Reparto: Danny Lee, Ping Chen, Lily Li, Lun Hua, Hsieh Wang, Chien Yu, Feng Ku, Hung Wei.